Rusia: los trabajadores luchan contra la austeridad COVID

Tendencia socialista, Federación de Rusia

En Rusia, durante la pandemia, ha habido una ola de protestas laborales y disturbios por las condiciones laborales y el impago de los salarios.

Primero fue una huelga de conductores de vehículos de servicios de mantenimiento en el distrito ruso de Ufa: hay descontento con los recortes salariales y con el hecho de que la administración no cumple sus promesas. Los trabajadores municipales tuvieron que trabajar en medio de la pandemia y durante la cuarentena.

El 6 de julio, los trabajadores del turno diurno se negaron a barrer, fregar, limpiar con manguera, reparar y tratar las calles contra el virus, y luego los trabajadores del turno nocturno los apoyaron [foto arriba]. El 7 de julio, los funcionarios anunciaron que se había iniciado una investigación sobre una queja colectiva de los trabajadores municipales.

Los trabajadores del servicio de entrega de comida “Delivery Club”, también se enfrentaron al impago de salarios, enormes multas sin fundamento y ningún contrato de trabajo regulado. Los riders respondieron con una huelga, organizada por el sindicato “Courier”, apoyada por iniciativas de grupos en San Petersburgo, en Nizhny Novgorod y en Novosibirsk. El 9 de julio, unos 300 riders aparecieron en la oficina central de la empresa matriz exigiendo el pago de salarios, la cancelación de las multas y contratos de trabajo reales.

Como resultado, se liquidaron todas las deudas, por un monto de 9 millones de rublos. A pesar de este éxito, el sindicato continúa su trabajo: no se cumplieron todas las demandas y no hay garantía de que no se repitan los retrasos salariales.

El 13 de julio, en la fábrica “Gasprom” en el río Amur [nota: en la frontera entre el Lejano Oriente ruso y el noreste de China], 300 trabajadores organizaron una revuelta total. La oficina del contratista “Renaissance Heavy Industries”, que no había pagado a sus trabajadores su salario en tres meses, fue saqueada. Los disturbios terminaron con la llegada de la policía antidisturbios y la dispersión de los manifestantes. Se abrió una causa penal contra los manifestantes por su participación en los desórdenes.

La edición en línea de Readovka.ru tuvo acceso a un documento llamado “la llamada de la empresa a los empleados” que promete pagarles los salarios atrasados y aumentar la tarifa por hora en un 5%.

El mismo día en Moscú, en el microdistrito de Levoberezhny, los conserjes, la mayoría procedentes de los países de Asia Central, se reunieron en la oficina de “Zhilishchnik”, una empresa municipal local. Los trabajadores dicen que sus salarios se han reducido en un tercio, lo que la gerencia niega.

El 14 de julio, en el microdistrito de Severnoye Chertanovo en Moscú, hubo una pelea masiva: la falta de pago de salarios fue nuevamente la razón más probable. A juzgar por el video, los trabajadores migrantes se encuentran en una situación extremadamente desesperada y están listos para hacer cualquier cosa con el objetivo de detener las mentiras.

El 17 de julio, cientos de trabajadores en el aeropuerto de Sheremetevo se reunieron para exigir los pagos por las horas extras.

Ese mismo día, 500 trabajadores de la construcción en el Centro Lakhta en San Petersburgo [un rascacielos de 87 pisos, el edificio más alto de Europa] se declararon en huelga exigiendo el pago de los salarios atrasados [ver vídeo arriba]. Aquí también, una gran cantidad de migrantes de Asia Central estuvieron activos, otra indicación de su importancia en la defensa de los derechos laborales en Rusia. Los medios de comunicación rusos informaron que las protestas de los trabajadores en otras regiones fueron otra razón importante de la huelga.

El mes anterior, los empleados de la empresa “SVLK”, que elimina y revende cosas no deseadas de los apartamentos, se negaron a realizar su trabajo. La compañía considera que sus empleados son “voluntarios” y no les ha pagado durante mucho tiempo.

Autodefensa organizada

Todos estos eventos recientes muestran que las protestas laborales más exitosas son acciones organizadas, llevadas a cabo a través de organizaciones sindicales, que unen y dirigen a los trabajadores en un área en particular, defienden sus derechos a nivel legal y negocian con los empleadores en interés de sus miembros.

Lo que todos estos eventos similares, con las mismas razones y casi los mismos resultados, muestran cada vez es que, ante una crisis y depresión económica la burguesía trata de mantenerse a flote y evitar perder ganancias, todo a expensas de sus trabajadores; éstos a su vez se enfrentan a la pobreza y la desesperación.

Están listos para luchar por sus derechos laborales por cualquier medio disponible, desde paros espontáneos hasta huelgas y disturbios.

Desafortunadamente, es imposible lograr mejoras sólo mediante una ruta pacífica y “legal”. Sólo a través de la influencia directa sobre la propiedad o las ganancias es posible conseguir un cambio. También es imposible que los trabajadores salgan de una situación opresiva mientras un pequeño puñado de capitalistas, y lo más importante, la distribución de los productos de su trabajo, tengan poder sobre ellos. Para distribuir la riqueza para cubrir las necesidades de la sociedad y el progreso, ésta no debe permanecer en manos de unos pocos y servir para satisfacer sus propios intereses.

Las demandas económicas dan lugar a demandas políticas, que unirán a los trabajadores en todas las industrias y regiones de Rusia y el mundo. Algún día, el objetivo ya no será un empleador específico, sino la élite política, el Estado y el orden económico mundial.

Al actuar juntos y mostrarnos solidarios, podemos cambiar no sólo nuestra propia situación, sino también la del mundo.

Tendencia socialista es el grupo hermano en Rusia de Marx21. Publicaron este reportaje en su página el 21 de julio.

Foto principal: Mitya Lyalin / RTVI. Otras fotos: vía Tendencia socialista.