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La situación en Corea del Sur cambia rápidamente. Esta declaración de la organización hermana coreana de Marx21 se publicó días antes de la aprobación del impeachment (“destitución”) del presidente Yoon Suk Yeol, que ocurrió el 14 de diciembre. Yoon está suspendido de su cargo, pero aún no lo ha perdido definitivamente.

Por otro lado, el parlamento coreano acaba de votar el impeachment de Han Duck-soo, mencionado abajo, que actuaba de presidente interino tras el 14 de diciembre. Con todo, el argumento central del texto —la necesidad de impulsar la movilización y reforzar su contenido de clase— es más válido que nunca.

Solidaridad Obrera (Corea del Sur)

Después de que el intento de golpe de Estado de Yoon Suk-yeol fracasara estrepitosamente, la derecha está desesperada por controlar la situación. Quieren ganar tiempo para gestionar la transición “post-Yoon”.

El líder del Partido del Poder del Pueblo (PPP derecha conservadora), Han Dong-hoon, y el primer ministro, Han Duck-soo, han anunciado que gobernarán el país juntos. Hicieron una extraña declaración argumentando que “el presidente ha sido destituido”. Aunque Yoon no había renunciado ni se había aprobado en la Asamblea Nacional un proyecto de ley para destituirlo.

La derecha está tratando de evitar a toda costa ceder la iniciativa a la oposición, pero le cuesta encontrar la manera de controlar la situación. Por el momento, la derecha está dividida sobre el tema del impeachment de Yoon.

Los medios de comunicación de derechas JoongAng Ilbo y Dong-A Ilbo criticaron el plan de Han-Han de gobernar el país juntos como una “medida provisional” y una “ingeniería política superficial”. Creen que el impeachment es inevitable para controlar la situación.

Por otro lado, otros medios de comunicación de derechas, The Chosun Ilbo y Maeil Business Newspaper, parecen inclinarse por una “salida ordenada”.

El Partido Democrático, liberal, que actualmente controla el parlamento y es el principal partido de la oposición, dijo que las únicas opciones de Yoon son renunciar o ser destituido.

Sin embargo, el PPP se opone tanto a la renuncia como al impeachment. El PPP se abstuvo de votar en el primer proyecto de ley de impeachment, matándolo efectivamente. No votaron en absoluto, temiendo deserciones internas.

El Partido Democrático luego anunció que seguirían luchando por la destitución hasta que se aprobara.

Es poco probable que el panorama político se desarrolle de forma lineal a favor de los Demócratas. Hay tanta incertidumbre y fluidez que las cosas podrían cambiar rápidamente.

Incluso el regreso de Yoon al primer plano no está completamente descartado. Incluso la publicación de derechas JoongAng Ilbo se preocupó de que “no hay garantía de que el presidente Yoon cumpla”. De hecho, Yoon nunca ha reconocido que estuvo mal declarar la ley marcial.

Ejército

Además, el control del ejército sigue estando en manos de Yoon. El Ministerio de Defensa también ha confirmado que él controla el ejército. Por lo tanto, mientras Yoon permanezca en el cargo, podría declarar nuevamente la ley marcial. En particular, podría provocar a Corea del Norte, lo que le daría una excusa para llevar a cabo un segundo golpe de Estado.

De hecho, antes de declarar la ley marcial, Yoon intentó provocar una guerra local con Corea del Norte, utilizando los globos de basura norcoreanos como excusa. Se reveló que el exministro de Defensa Kim Yong-hyun instruyó al presidente del Estado Mayor Conjunto: “Si un globo de basura vuela desde Corea del Norte, golpee el origen después de disparos de advertencia”.

Por lo tanto, el riesgo del resurgimiento de Yoon no se ha eliminado completamente.

Por supuesto, Yoon ha perdido mucha credibilidad, por lo que habría una reacción mucho mayor si intentara volver al primer plano.

Si un segundo golpe de Estado es difícil debido al equilibrio de fuerzas, las fuerzas de la derecha en las calles podrían intervenir.

Ya el 7 de diciembre se celebró una manifestación anti- impeachment encabezada por el pastor de extrema derecha Jeon Gwanghun en la Plaza Gwanghwamun —la plaza emblemática de la capital coreana, Seúl— con decenas de miles de personas.

Por lo tanto, el movimiento anti-Yoon no debe dejar vacía la Plaza Gwanghwamun. Necesitamos construir una gran protesta que se dirija hacia la Oficina Presidencial de Yongsan. Si el proyecto de ley de destitución no se aprueba nuevamente esta semana, debemos reunirnos en la Plaza Gwanghwamun y marchar hacia Yongsan la próxima semana.

Los trabajadores y estudiantes deben salir a las calles en masa

Una forma de quitar a Yoon es mediante el impeachment por parte de la Asamblea Nacional. Sin embargo, incluso si la Asamblea Nacional aprueba un proyecto de ley de destitución, el proceso para finalizar la destitución es extremadamente incierto y está plagado de variables abyectas, incluida la decisión del Tribunal Constitucional.

Por lo tanto, aunque apoyamos el llamado al impeachment, debemos enfatizar que el llamado a la destitución inmediata de Yoon (su renuncia instantánea) es más efectivo.

Pero más importante que si se trata de impeachment o destitución inmediata es la fuerza motriz del movimiento.

Millones de personas deben salir a la calle. Las protestas del sábado, 7 de diciembre, demostraron que es posible. Las personas trabajadoras y el pueblo común derrotaron el golpe de Estado militar de Yoon Suk-yeol, el cuarto en la historia moderna de Corea del Sur, con sus propias manos. Envalentonados por esta experiencia, muchas nuevas personas están saliendo a las calles todos los días.

En particular, es importante que más personas trabajadoras y estudiantes participen en las protestas anti-Yoon. Las trabajadoras que se sienten empoderadas por las luchas políticas en las calles también pueden luchar en el lugar de trabajo. Las huelgas económicas de la gente trabajadora por sus demandas específicas (como salarios más altos) son las más efectivas para aumentar el tamaño y la militancia general del movimiento.

Cuando las luchas políticas y económicas interactúan de esta manera, el movimiento puede crecer y profundizarse. En este sentido, es muy alentador que las y los trabajadores ferroviarios estén en huelga por salarios más altos, más personal y el fin de la subcontratación, mientras también participan en las manifestaciones anti-Yoon.

Las acciones de las y los estudiantes también son importantes. Una de las características más destacadas del actual movimiento anti-Yoon es la gran cantidad de estudiantes jóvenes participantes. Esto es diferente al último movimiento anti-presidente en 2016-2017 contra Park Geun-hye, y es un desarrollo muy importante.

Las acciones estudiantiles en las calles pueden ser un catalizador para la lucha de la clase trabajadora. Las protestas en las calles de junio de 1987 allanaron el camino para la huelga masiva de las y los trabajadores en julio-agosto.

Muchos y muchas estudiantes ahora están realizando exámenes durante el día y asistiendo a las manifestaciones por la noche. Este sábado, tantos estudiantes como sea posible deberían unirse a las protestas en las calles.

La situación no es tan fácil como parece y hay algunas batallas muy feroces por delante. Como gritó el revolucionario Georges Danton de la Revolución Francesa a finales del siglo XVIII: “¡Audacia, y más audacia, y siempre audacia!”

Solidaridad Obrera (organización hermana en Corea del Sur de Marx21), 10/12/2024 

Estas declaraciones aparecieron en la web de Solidaridad Obrera, aquí y aquí.