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Sergio Loris

En pleno viernes Santo (29 de marzo) nos despertábamos con la noticia de que Mahón era el puerto elegido por el ministerio de defensa para ser la tercera base naval de la OTAN en el Estado español. La noticia corrió como la pólvora por el camí de cavalls menorquí, antaño el camino que recorrían los jinetes mensajeros para anunciar la llegada de enemigos y piratas.

En los diferentes chats de organizaciones políticas y de activismo había bastante revuelo, y se iban lanzando al vuelo diferentes propuestas. Finalmente, al final del día, desde Esquerra de Menorca (IU) se lanzó un comunicado llamando a las diferentes organizaciones y gente a título personal a una asamblea abierta en el local de la formación política, de forma que fuera todo más ágil y fácil. La respuesta fue espectacular, pues vinieron representantes de 25 organizaciones y gente a título personal, activistas habituales de la isla, casi 50 personas en total. Nos acompañaba también casualmente Agustín Santos, diputado de Sumar por Madrid en el Congreso, y que está en la comisión de defensa, que se encontraba en la isla esos días.

El resultado de la asamblea fue la convocatoria de una manifestación para el domingo día 7 de abril, la presentación de la “Plataforma per la Pau” (formada en 2004 y recuperada para esta ocasión), y la concentración el lunes en el puerto para desplegar una lona gigante contra la OTAN y las bases militares, y presentar la plataforma a los medios (ese lunes iba a venir una fragata de la OTAN al puerto de Mahón, pero por razones que no sabemos, se canceló dicha llegada). Se acordó también realizar un manifiesto conjunto, que fue rápidamente consensuado. Hay que destacar la rapidez de acción y la buena sintonía entre todas las personas participantes.

La semana transcurrió con noticias ambiguas sobre la base naval. Ya no iba a ser permanente, sino transitoria y temporal, y solo de aprovisionamiento.

La realidad es que los barcos de la OTAN llevan años viniendo a Menorca a hacer las “típicas” maniobras militares y a confraternizar entre soldados de diferentes países. Y todos sabemos el punto estratégico que ha sido el puerto de Mahón a lo largo de la historia, ¿Por qué iba ser diferente ahora? La Plataforma per la Pau y la manifestación seguían adelante. Las adhesiones a ella seguían subiendo (a fecha de hoy vamos por 33 organizaciones sociales, culturales, sindicales y políticas).

La manifestación del domingo día 7 fue todo un éxito de asistencia, de participación, y de vuelta a la normalidad tras unos años post pandemia caracterizados por la desunión y la desmovilización.

También quiero destacar la presencia de Agustín Santos y Félix Alonso, ambos diputados por Sumar, así como de Ismael González (responsable de organización), y Jon Rodríguez (responsable federal de internacional), ambos últimos de Izquierda Unida. Manu Pineda, Sira Rego y Enrique Santiago no pudieron venir por agenda, pero estuvieron siguiendo los acontecimientos de cerca. Con esto quiero decir que ha levantado revuelo a nivel nacional, y en términos de coalición de gobierno. De hecho, Agustín Santos afirma que la cancelación de la visita de la fragata Navarra se debió a la aparición de este movimiento antiguerra y de no querer hacer polémica al respecto por parte del ministerio de defensa.

El lunes día 8, durante la presentación de la Plataforma, se descolgó una pancarta por el acantilado del puerto. La acción fue interceptada por la policía, y acabó con la identificación de varios activistas, señal de que todo esto les ha puesto en alerta, en un lugar, Menorca, donde no están tan acostumbrados a esto. Quizá el revuelo, que ha traspasado más allá de la isla, haya causado su nivel de alerta.

Tras estas primeras acciones, la Plataforma sigue, ya con fecha de próxima asamblea abierta, en lugar por acordar, y abierta a nuevas acciones, movilizaciones, etc., y ligada a la reciente creación este año del Comité de Solidaritat Menorca-Palestina, y la aparición de un nuevo medio de comunicación independiente: Revista Posidonia. Son buenas noticias para los movimientos sociales, y para la participación política en la isla.

Hay una calma tensa en todo el espectro político de la izquierda, en el que nadie sabe para dónde tirar exactamente, y quizá no haya que ir muy lejos ni buscar salidas muy sofisticadas.

Frente al clima pre bélico que nos anuncian algunos dirigentes europeos alejados de la realidad de sus conciudadanos, frente a los anuncios de gastos de miles de millones de euros de los bolsillos de toda la población de Europa para financiar guerras como la de Ucrania, frente al vasallaje de nuestro gobierno, y de Europa a la OTAN y a EEUU, hay un lema que siempre nos unirá a la clase trabajadora de todo el mundo: ¡No a la guerra!

Sergio Loris es militante de Esquerra de Menorca

Manifiesto: Menorca por la paz: OTAN no, bases fuera

La plataforma Menorca por la paz, constituida por varios colectivos sociales, partidos políticos, sindicatos, y personas a título individual, frente a la amenaza que supone utilizar el puerto de Maó para poner una base militar de la OTAN, sea permanente o puntual, sin contar con la sociedad menorquina y ante la falta de información de los planes del gobierno y sus consecuencias, queremos poner en conocimiento de la sociedad y los responsables institucionales lo siguiente:

– No en la guerra, sí en la paz. La solución a las diferencias nunca puede ser la guerra. Ciertas posiciones políticas de incremento de la escalada belicista deben tener como respuesta el clamor pacifista de la ciudadanía de Menorca, no podemos quedarnos inmóviles.

– Bases no. Ni aquí, ni en ninguna parte. No queremos la base de la OTAN en Maó, ni en Rota, ni en Cartagena. Queremos vivir en paz. La conversión de Menorca en objetivo militar es un riesgo que no podemos permitirnos, ni aquí ni en ningún pueblo. Somos solidarios con el resto de pueblos.

– No queremos una Menorca militarizada. El interés estratégico del Mediterráneo es algo que no nos importa como pueblo, las preocupaciones de la gente son otras. No puede ser utilizado políticamente y va directamente en nuestra contra. No queremos volver a ser una isla militarizada como en tiempos pasados.

– Denunciamos el desorbitado presupuesto en armamento, y con finalidad militar para la guerra, que va en contra de los intereses del pueblo y la humanidad, mermando los recursos para servicios sociales, hospitales, enseñanza, asistencia social, etc. y de la humanidad.

– El belicismo acelera el cambio climático. Además de producir un impacto ambiental brutal, si dedicáramos los recursos de armamento a luchar contra el cambio climático, los beneficios para todas y todos serían muy considerables.

– No queremos ser una diana, está claro que de continuar una escalada bélica, Maó y Menorca pasaríamos a ser objetivo militar.

– Solidaridad con el pueblo palestino, condenamos la complicidad de EEUU y la OTAN en el genocidio que está perpetrando Israel contra el pueblo palestino. Solidaridad con el pueblo sirio, yemení, del Donbass, iraquí, afgano… y todos los lugares donde la OTAN tiene sus sucias armas.

No en nuestro nombre.

-No a la utilización del puerto por parte de barcos de la OTAN, el día 8 estaba prevista la llegada de una fragata al puerto de Maó, finalmente no vino, y podría ser fruto de esta importante movilización ciudadana, esta plataforma Menorca por la paz. No vendrán, no queremos bases de la OTAN.

¡OTAN no! ¡Bases fuera! ¡Menorca por la paz!