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Katerina Thoidou

El 8 de marzo, de este año, en Grecia se está convirtiendo en una movilización de huelga general en el sector público y privado.

Por sexto año consecutivo, el Día Internacional de la Mujer se convierte en un eje central para toda la clase trabajadora y la juventud, contra el gobierno del sexismo, la pobreza y la guerra.

Este año, con las decisiones de la Dirección Central de Sindicatos de Empleados Públicos (ADEDY), el Consejo Sindical de Atenas, la Federación Panhelénica de Empleados de Hospitales Públicos (POEDIN), los sindicatos primarios de salud, educación, municipios y muchos otros sectores, estamos avanzando con una huelga general para el 8 de marzo y manifestaciones en muchas ciudades.

Al mismo tiempo, las y los estudiantes que luchan en un movimiento de ocupación de las universidades contra los planes del gobierno de privatización de las mismas, han acordado en sus asambleas la participación organizada en la huelga del 8 de marzo.

En las manifestaciones del 8 de marzo participarán también las familias de las 57 personas que perdieron la vida en el accidente de tren del año pasado en Tempi, contra el gobierno que encubre el mayor crimen, para ocultar sus propias responsabilidades por la falta de medidas de seguridad en el ferrocarril. El año pasado hicimos historia en un día como este.

Las mujeres, junto con los trabajadores ferroviarios y toda la clase trabajadora, inundamos las calles de todo el país y unimos la indignación por los asesinatos en Tempi con la lucha contra la opresión sexista. Un año después del crimen de Tempi, el gobierno se enfrenta a bloqueos de granjas, ocupaciones estudiantiles y dos huelgas generales el 28 de febrero y el 8 de marzo.

Palestina

La huelga de este año también está dedicada a las mujeres de Palestina, porque queremos enviar el mensaje de que estamos luchando junto con nuestros hermanos y hermanas de Palestina contra las masacres de mujeres y niños de Netanyahu, en un momento en el que 1,5 millones de personas que están reunidas en Rafah están bajo amenaza, rodeadas de militares israelíes. Ante esto, el Gobierno griego ha decidido enviar una fragata al Mar Rojo para apoyar los crímenes de Israel.

La formación de la Iniciativa “Movimiento por la huelga del 8 de marzo” volvió a desempeñar un papel clave en las decisiones sindicales, habiendo obtenido decenas de resoluciones de participación de sindicatos y sentadas estudiantiles. Puede que este gobierno no tenga oposición en el Parlamento, pero tiene la oposición más fuerte que es el movimiento, la huelga, la ocupación y la manifestación.

Así como organizamos nuestras huelgas paso a paso para tener éxito, así organizamos el éxito del 8 de marzo. La reunión que tuvo lugar el 30 de enero en Atenas fue el comienzo de una enorme campaña que incluye diversas acciones, con debates en lugares de trabajo, universidades y barrios. Así obligamos a la burocracia sindical a asumir nuestras demandas.

Bajo el gobierno conservador de Nueva Democracia, Grecia ocupa el primer lugar en feminicidios, ¡con un aumento del 187% según el informe de Human Rights Watch! La violencia contra las mujeres, las violaciones y el acoso sexual en el lugar de trabajo salen a la superficie todos los días.

Las mujeres están mal pagadas y la brecha salarial se está ampliando. Los hospitales y todos los servicios de bienestar social que necesitan las mujeres se enfrentan al saqueo de la privatización. El gobierno de Mitsotakis se propone desmantelar el sistema público de salud psiquiátrica, en un momento en el que la depresión es aproximadamente un 50% más común en las mujeres que en los hombres. Los y las trabajadoras hospitalarias con contratos de duración determinada, principalmente mujeres —“los héroes de la salud”, como se les llamó durante la pandemia— se enfrentan ahora al despido porque el gobierno está procediendo a la privatización de la atención sanitaria. Estos ataques son los que allanan el camino para los violadores…

Dentro del sistema en multicrisis, se convierte el cuerpo femenino en un objeto. Vemos en todo el mundo, y especialmente en la Grecia de Mitsotakis, el regreso de todo el ataque ideológico de los años 50 sobre el “destino normal” de la maternidad y la creación de una familia. Esto se enfrenta directamente a todas las conquistas del período tras el mayo del 1968 en todo el mundo, que abrieron el camino a la liberación sexual de la mujer. El cuestionamiento del derecho al aborto y el control de la capacidad reproductiva de las mujeres forman parte de los ataques generales de los capitalistas contra la clase trabajadora en su conjunto, acompañado por el resurgimiento de toda la ideología sexista de lo que es normal y lo que es “anormal”.

Es por eso que también vemos que se atacan los derechos de la comunidad LGBTI+. El gobierno griego ha aprobado una ley sobre el matrimonio de parejas del mismo sexo… bajo la presión de nuestras luchas, y solo para mostrar una cara democrática. Pero al mismo tiempo, tras las presiones de la Iglesia y de la extrema derecha, se sigue excluyendo a las parejas del mismo sexo de la posibilidad de formar una familia y tener criaturas.

Demandas

El “Movimiento por la huelga del 8 de marzo” logró hacer mella en este tema. Señalamos que la opresión de las mujeres forma parte del esfuerzo general de la clase dominante y del Gobierno para poner la carga sobre las espaldas de la clase trabajadora y que las demandas específicas de las mujeres no pueden abordarse separadamente de las demandas de toda clase trabajadora por aumentos salariales, trabajo permanente y estable, salud, educación, servicios públicos y gratuitos para las necesidades de todo el mundo y no para el lucro de unos pocos.

A través de este proceso, en los últimos años hemos tenido el surgimiento del nuevo movimiento de mujeres que ha logrado transformar el tema de la violencia contra las mujeres y el acoso sexual de un tema individual a un tema político, convirtiendo el #MeToo en una corriente masiva de desobediencia social contra los estereotipos sexistas que este sistema fomenta sobre hombres, mujeres y la comunidad LGBTI+.

Con esta orientación el movimiento de mujeres, el “Movimiento por la huelga del 8 de marzo” ha logrado construir un movimiento de masas en Grecia que lucha contra la opresión de las mujeres, con los sindicatos entrando en la primera línea de esta lucha.

La unidad de las mujeres y los hombres de la clase trabajadora y las luchas conjuntas son de enorme importancia porque fortalecen nuestras presiones y demandas. Pero también, porque a través de este proceso se rompen en la práctica los estereotipos conservadores y las ideas sexistas que este sistema impone para dividir a la clase trabajadora y para explotarla.

El movimiento de huelga del 8 de marzo sostiene que luchar por lo que se consideran derechos de las mujeres es en realidad luchar por toda la clase trabajadora contra un gobierno que antepone las necesidades de las ganancias de los capitalistas por encima de las necesidades de la mayoría. Así que la batalla contra el sexismo y la opresión pasa por la exigencia de que este gobierno caiga.


Katerina Thoidou es militante de SEK, la organización hermana de Marx21 en Grecia.