Juan Antonio Gilabert
Hace poco tiempo, vi una peli muy interesante titulada Presidente bajo fuego (en inglés, Angel Has Fallen). Sus protagonistas principales son Gerard Butler, Nick Nolton y Morgan Freeman.
La película en cuestión, forma parte de una trilogía llamada Bajo fuego (“Has Fallen” en inglés).
Las dos primeras películas son las típicas películas de terroristas extranjeros que intentan matar al presidente estadounidense de turno. Pero todo falla cuando uno de los agentes del FBI o la CIA, resulta ser un super soldado que salva a la patria y al presidente y todo es maravilloso.
Pero la tercera de la saga rompe el esquema y ahora son terroristas estadounidenses los que intentan matar al presidente para que éste no cambie la política imperialista de EEUU, ni prohíba la privatización del ejército, que ha dado millones y millones de ganancias a los empresarios que se dedican a la seguridad privada.
Además, el presidente de EEUU es contrario a la política imperialista de su país y se propone implementar políticas más sociales. No sólo eso, sino que el protagonista tiene un padre desertor de la guerra del Vietnam, que le cuenta al protagonista, lo malo que es el Estado y el ejército. El protagonista es el único personaje de la saga que sigue el estilo. Él es el que protege al presidente y salva al país del intento de golpe de estado desde dentro.
Acción
Este argumento es una revolución en el cine de acción, que va cogiendo cuerpo desde que se estrenó en 2005 Triple X2, peli muy parecida a Presidente bajo fuego, solo que el protagonista es un agente de la CIA, negro y de los bajos fondos y utiliza los bajos fondos de la capital de EEUU, para parar el golpe de estado realizado para detener los planes de un presidente que también quiere cambiar el rumbo militarista del país.
Ya han quedado atrás las películas en las que solo extraterrestres o extranjeros intentan atacar a EEUU. Desde la segunda guerra de Irak, donde se privatizó el ejército y las grandes empresas ganaron grandes cantidades económicas. Luego, comenzó la crisis económica bajo el mandato de Bush hijo.
Cada vez son más las películas de acción de EEUU que nos muestran que el enemigo de la libertad es la derecha o la ultra derecha estadounidense, capaz de dar golpes de estado para defender sus ganancias económicas gracias a las guerras imperialistas, mientras la clase obrera, está cada vez peor y confía en que un presidente cambie las cosas desde arriba, por eso creo que estas pelis tienen mucha audiencia.
Lo malo de estas películas es que nos muestran que a la extrema derecha se la puede parar desde arriba, con un presidente buenista y si todo sale mal, siempre estará el héroe de turno y el Estado detrás…
La duda que tengo, es cómo serán las próximas películas de acción después del asalto real de la extrema derecha, este año, al Capitolio alentado por un presidente en funciones.
