Nota de prensa de Marx21
Más de setenta personas y entidades de diferentes partes del Estado español se han sumado a la declaración: “No queremos represión en Grecia, ni en ninguna parte”.
Como explica el texto “El pasado domingo, 6 de diciembre, la policía griega detuvo en Atenas a un total de 80 activistas de izquierdas en un acto de conmemoración del aniversario del asesinato de Alexandros Grigoropoulos, un estudiante de 15 años que fue abatido por la policía el 6 de diciembre de 2008.”
Gran parte de las personas detenidas son militantes del SEK, el Partido Socialista de los Trabajadores, organización hermana en Grecia de Marx21.net, la red anticapitalista en el Estado español que ha gestionado la llamada.
Sin embargo, insisten, éste no es un tema partidista, sino que es un ataque general a los derechos democráticos y afecta a todo el mundo. De hecho, según el texto: “forma parte de un patrón que se extiende por Europa”, citando a los presos políticos catalanes y a las personas represaliadas bajo la ley mordaza en el Estado español, o la represión que Macron está aplicando ahora en Francia.
Es más, “Esta actuación policial debe entenderse en el contexto de la lucha contra el partido neonazi, Amanecer Dorado, condenado recientemente tras un largo juicio. Recordemos que la mitad de la policía de Atenas votaba a este partido.” Es que gran parte de las personas detenidas habían jugado un papel activo en la derrota reciente de los neonazis griegos. Éstas incluyen a Petros Konstantinou, coordinador de KEERFA, el movimiento unitario contra el fascismo y el racismo en Grecia, así como dos abogados de la acusación popular de KEERFA contra Amanecer Dorado.
Kadijatu Dem Njie, activista destacada de Marx21 y de los movimientos antirracistas, comenta: “Ahora cuando tenemos tan presentes los trágicos resultados del racismo institucional, que ha provocado la muerte de tres personas en Badalona, es más importante que nunca promover y defender la lucha unitaria contra el racismo y la extrema derecha.”
Las detenciones no duraron mucho; provocaron una tormenta de protestas, que abarcó a casi toda la izquierda, con fuertes denuncias de los hechos por parte de Syriza, el Partido Comunista de Grecia, los sindicatos…
Como comenta David Karvala de Marx21: “Muchas veces, la lucha contra la represión se ve como una cosa marginal, limitada a ciertos colectivos de la izquierda radical. Pero estos ataques contra los derechos humanos que estamos viendo son una grave amenaza para cualquier demócrata. Cuando atacan los derechos de las personas migradas y/o racializadas; sindicalistas; personas LGTBI; ecologistas; independentistas… o como en este caso, activistas de izquierdas, es un ataque contra todas y todos.”
Es evidente que así lo han entendido muchas personas. Las adhesiones a la declaración —todas recogidas en muy pocos días— incluyen figuras de la política, como Maria Dantas, Joan Josep Nuet y Gerardo Pisarello del Congreso; Natàlia Sànchez Dipp y Salwa El Gharbi del Parlament catalán; y Omar Noumri Coca, alcalde de Castelló de Farfanya (Lleida). De otros sectores, destacan el apoyo de activistas y dirigentes de sindicatos muy diversos, así como de organizaciones cívicas, desde Marcel Mauri de Òmnium Cultural, pasando por Unitat Contra el Feixisme i el Racisme y entidades LGTBI, hasta asociaciones de memoria histórica, como Carles Vallejo, represaliado bajo la dictadura y presidente de la Associació Catalana d’Expresos Polítics del Franquisme.
Pero también firman muchas personas de a pie, por pura solidaridad. Marx21 y la corriente internacional de la que forma parte tienen como elemento distintivo la importancia de las luchas desde abajo, por parte de la gente trabajadora corriente.
La declaración entera y la lista completa de adhesiones se pueden consultar aquí.