Folleto Marxismo y feminismo hoy

Marx21

Los últimos años han visto una ola de importantes luchas de mujeres. Aquí sólo cabe mencionar algunas de ellas.

La llegada a la Casa Blanca de Donald Trump en 2016 fue respondida por masivas manifestaciones de la “Women’s March” por todo Estados Unidos, incluso con réplicas internacionales.

De la misma manera, cuando Jair Bolsonaro se presentó a las elecciones presidenciales en Brasil en 2018, las mujeres brasileñas se movilizaron contra él de manera impresionante, con el lema #EleNão.

Ha habido luchas importantes sobre el derecho al aborto en varios países, desde Argentina hasta la república de Irlanda, donde una gran movilización logró una victoria en un referéndum sobre el tema, derrotando así a la cúpula de la iglesia católica.

Las mujeres en India hace años que se movilizan, frente a la epidemia de violaciones y otras violencias de género, y más recientemente juegan un papel central en las luchas contra las medidas islamófobas y sectarias del primer ministro ultra, Narendra Modi.

La denuncia del acoso y abuso sexual lanzado desde Hollywood con el hashtag #MeToo se ha convertido en una ola internacional que se enfrenta a la situación terrible de impunidad que tenían estos comportamientos machistas hasta ahora.

En el Estado español, las manifestaciones del 8M, siempre más que dignas, han dado paso a movilizaciones masivas y en los últimos años a huelgas con motivo de esta fecha. Por otro lado, hubo protestas inéditas tras la sentencia en el caso de violación colectiva conocido como “La Manada”.

Todo esto es enormemente positivo, y necesario, porque también estamos viviendo un resurgimiento del machismo en sus formas más crudas, a menudo asociado con el crecimiento de la extrema derecha. Igual que las mujeres en otros países se han enfrentado a la extrema derecha, en el Estado español los movimientos de mujeres han contribuido mucho a las protestas ante la llegada a la escena política del partido de extrema derecha, VOX. Un partido, como sabemos, hace del ataque a los derechos de las mujeres un elemento central de su política.

Sin embargo, estas luchas también plantean muchos debates estratégicos. ¿Cómo podemos ganar? ¿Qué hay que cambiar, sólo algunas actitudes, o todo un sistema social? ¿Cuál es el sujeto para conseguir la liberación de las mujeres: sólo los grupos feministas, y una minoría de las mujeres; el conjunto de las mujeres, las Hilary Clinton incluidas; o hay que implicar, más bien, al conjunto de la clase trabajadora, tanto a las mujeres como a los hombres?

Para intentar dar respuestas es por lo que publicamos este folleto. El texto central se publicó en inglés en 2010, y ha pasado mucho desde entonces. Sin embargo, los argumentos que presenta, ante lo que entonces sería la tercera ola del feminismo, siguen siendo relevantes ante la actual y masiva cuarta ola.

El artículo de Judith Orr abarca mucho, desde la historia de las luchas de mujeres con las sufragistas, la revolución rusa, el feminismo de EEUU en la década de 1960… Analiza el resurgimiento del nuevo sexismo, y cómo éste presenta la mercantilización de los cuerpos de las mujeres como “empoderamiento” o “liberación”. Y Orr señala que:

“Cada aumento sucesivo en la lucha contra la opresión de las mujeres ha visto surgir debates entre el marxismo y el feminismo. Las preguntas sobre la relación entre explotación y opresión, de clase y género, y sobre cómo organizarse mejor para luchar por la liberación de las mujeres se repiten desde el siglo XIX hasta nuestros días.”

Así que un objetivo del artículo es plantear una estrategia para la liberación de las mujeres basada en el marxismo revolucionario.

Basándonos en las declaraciones y documentos de los movimientos actuales, se ve que el marxismo tiene muy poca aceptación entre ellos. Sin embargo, una cosa son las ideas que se supone que se defienden, otra el espíritu real del movimiento. Hace 90 años, el  marxista revolucionario Gramsci escribió que una persona:

“tiene dos conciencias teóricas (o una conciencia contradictoria): una implícita en su hacer, y que realmente lo une a todos sus colaboradores en la transformación práctica de la realidad, y otra superficialmente explícita o verbal, que ha heredado del pasado y ha recogido sin crítica.” (Gramsci 1971, p. 16).

La “conciencia explícita o verbal” de gran parte del movimiento feminista se basa en la teoría del patriarcado y la idea de que todas las mujeres tienen un interés común, frente a todos los hombres, que colectivamente se beneficiarían de la situación actual de la opresión. Sin embargo, en la práctica, muchas de las nuevas activistas feministas saben que poco o nada tienen en común con las mujeres de la clase dirigente. En la práctica, tienen mucha conciencia de clase, como revela el éxito reciente de las huelgas del 8 de marzo. (Sobre esto, ver Morante 2018a).

Orr termina su texto con esta llamada:

“El argumento de que necesitamos desafiar al sistema capitalista en sí es popular. Muchas de las mujeres jóvenes que se declaran feministas, que colocan pegatinas sobre anuncios sexistas o crean nuevos sitios web y grupos feministas, están lejos de sentir hostilidad hacia las ideas socialistas.

Necesitamos unirnos a esas mujeres en las luchas a las que nos enfrentamos, ya sea contra los recortes en la educación o los intentos potenciales de los conservadores de atacar el derecho al aborto. Debemos organizar debates y protestas sobre la publicidad sexista y sobre la lucha por una verdadera liberación sexual. Debemos formar parte de cada lucha contra cualquier expresión de la opresión de las mujeres, pero siempre con una visión acerca de cómo podemos ganar una sociedad totalmente libre de opresión.”

Con este mismo espíritu publicamos este folleto.

Divisiones recientes

Sin embargo, como se ha dicho, el texto se escribió en Gran Bretaña en 2010. Ofrece una buena base para analizar la situación y los debates actuales, pero es interesante poner al día algunos de sus argumentos, y relacionarlos con la situación en el Estado español.

El primer texto del folleto, de Marina Morante, plantea brevemente algunos aspectos de la situación actual aquí. Lo vivido en el Estado español en los últimos años sólo confirma el argumento de Orr. (Ver también Morante 2018a, sobre el 8M, y Morante 2018b sobre las protestas con motivo de “La Manada”).

Pero hay otros ámbitos donde la experiencia ha sido mucho más difícil, y lejos de ver un movimiento unido, se han visto fuertes debates y divisiones.

Un tema que de hecho afecta directamente a la gran mayoría de las mujeres del mundo es el del racismo. Algunos sectores del movimiento feminista a veces hablan y actúan como si “la mujer típica y normal” fuera una mujer blanca, con estudios y de una clase acomodada. Las estrategias y prioridades se plantean desde aquí. En cambio, las experiencias de opresiones y de explotación de una mujer negra trabajadora son bastante diferentes; las estrategias y alianzas que ella considera necesarias pueden ser muy diferentes. Sobre esta cuestión, incluimos otro texto nuevo, de Kadijatu Dem.

¿Y las mujeres trans?

Luego tenemos el debate acalorado —a veces violento— respecto a la opresión trans, y la relación de las mujeres trans con el feminismo.[1]

Sobre este tema, incluimos un artículo de Laura Miles, una activista trans (y marxista revolucionaria) de Gran Bretaña, donde estos debates ya llevan varios años. Aquí, ella responde a las preocupaciones —y a veces hostilidad— expresadas por algunas feministas, frente a las demandas del movimiento trans, y específicamente frente a una propuesta de reforma legal que aumentaría los derechos de las personas trans.

Finalmente, incluimos unas notas del grupo Marx21 sobre la polémica levantada cuando Izquierda Unida ha expulsado al Partido Feminista, por las posiciones defendidas por este grupo sobre el tema trans. De nuevo, estas notas buscan el acercamiento entre el movimiento feminista y los y las activistas trans, en base a la lucha unitaria contra todo tipo de opresión. Esto, a su vez, requiere un marco teórico capaz de señalar los intereses compartidos por el conjunto de la clase trabajadora, independientemente del género de cada persona y de si éste es de nacimiento o resultado de una transición.

Las autoras

Judith Orr participa desde hace décadas en las luchas por los derechos de las mujeres y sobre el aborto. Creció en el norte de Irlanda, donde el aborto es efectivamente ilegal. Es militante del Socialist Workers Party (SWP, organización hermana en Gran Bretaña de Marx21) y fue miembro de su comité central cuando escribió el texto traducido aquí. Es autora de los libros Abortion Wars, the fight for reproductive rights (Policy Press, 2017) y de Marxism and Women’s Liberation (Bookmarks, 2015).

Laura Miles fue profesora de ciencias sociales y activista en el sindicato del profesorado de universidades y formación profesional, UCU. Milita en el SWP desde la década de 1970. Laura fue la primera persona abiertamente trans en formar parte de la ejecutiva nacional de un sindicato británico.

Marina Morante es militante de Marx21 y activista en los movimientos sociales, especialmente en el distrito barcelonés de Nou Barris, donde vive.

Kadijatu Dem es militante de Marx21 y activista de Unitat Contra el Feixisme i el Racisme. Trabaja en el campo de la violencia de género. Ha estudiado la islamofobia de género.

Traducción

“Marxismo y feminismo hoy” de Judith Orr: traducción, Xoán Vázquez; revisión y corrección, Paty Gómez

“La guerra contra las personas trans” de Laura Miles: traducción, Santi Amador; revisión y corrección, Paty Gómez

Bibliografía

Gramsci, Antonio (1971), El materialismo histórico y la filosofía de Benedetto Croce, Buenos Aires: Ediciones Nueva Visión.

Morante, Marina (2018a), “8M: una victoria contra el machismo y la explotación”, en Marx21.net, 17/03/2018.

Morante, Marina (2018b), “Nosotras somos la manada”, en Marx21.net, 30/04/2018

Karvala, David (2010), “Una visión anticapitalista de la prostitución: más allá de la prohibición o la normalización”, en davidkarvala.blogspot.com, 14/02/2010.


[1]    Hay otro debate muy importante dentro del movimiento feminista, respecto a la prostitución, que no se trata explícitamente en este folleto. Se puede consultar un texto extenso sobre el tema, escrito hace tiempo por un activista de Marx21, Karvala 2010.