Socialist Worker
Decenas de miles de personas marcharon por el centro de Londres el pasado sábado para oponerse al racismo y al fascismo. Sindicalistas, miembros del Partido Laborista, brasileños, musulmanes, concejales, activistas palestinos y otros se unieron a la marcha.
Stand Up to Racism (SUTR), convocante de la marcha con Unite Against Fascism, cifra la participación en 40.000 personas.
La marcha mostró el tipo de unidad de lucha que necesitamos contra las mentiras y la división que promueven los racistas y la extrema derecha. Fue un signo poderoso de la voluntad de resistir el racismo, la islamofobia y el antisemitismo.
Maria Morris vino como integrante del grupo de brasileñ@s contra el fascismo. “Soy de Brasil, donde Jair Bolsonaro acaba de ser elegido”, dijo a Socialist Worker. “Es un fundamentalista religioso, es racista, es homófobo. Es nuestro Trump.”
“Tenemos que luchar contra estas personas en todas partes.”
Becky, una estudiante de York, le dijo a Socialist Worker, “Necesitamos hacer algo más temprano que tarde”, dijo, e instó a las personas a que “no esperen a que el próximo gobierno haga cambios”.
Dos manifestantes romaníes dijeron que estaban allí “para protestar contra el racismo hacia las personas romaníes y gitanas”.
Los gritos de “Dilo en voz alta, dílo con claridad, ¡los refugiados son bienvenidos aquí!” sonaron a lo largo de la manifestación, particularmente desde el animado cortejo de estudiantes.
Sindicalismo contra el fascismo
Riccardo La Torre, secretario regional de la región oriental del Sindicato de Bomberos, dijo a Socialist Worker: “Hemos estado desarrollando una actividad antirracista en el sindicato. Queremos mantener una orgullosa tradición de enfrentar las ideologías que perjudican a los trabajadores”.
“Es parte de defender a las comunidades que servimos contra la basura expuesta por gente como Tommy Robinson. Dicen que los servicios están sobrecargados y los salarios son bajos debido a los inmigrantes. Hemos estado en suficientes piquetes para saber que no son los fontaneros polacos o los musulmanes locales los responsables, sino las políticas de los conservadores.”
“Permitir que nos dividan con el racismo nos distrae de los problemas reales. Tommy Robinson dice que habla en nombre de la clase trabajadora. Pero después del incendio de la torre de pisos de Grenfell culpó a los inmigrantes del incendio. Mostró su verdadera cara”.
Claudia Webbe, miembro de la ejecutiva nacional del Partido Laborista, dijo en el mitin al final de la marcha: “Necesitamos un gobierno laborista dirigido por Jeremy Corbyn lo antes posible”.
Y agregó: “Cuando nosotros, los laboristas, lleguemos al poder, no nos detendremos contra el racismo.”
Muchos sindicalistas estuvieron presentes en la marcha.
Mark Serwotka, secretario general del sindicato de la administración estatal, PCS —y actual presidente de la central sindical TUC, que también convocó a la manifestación— dijo: “Esta marcha es una de las más importantes que hemos tenido en años. Vivimos tiempos emocionantes pero también tiempos peligrosos.”
“Donald Trump y Nigel Farage. Estas personas están tratando de hacer las opiniones más viles respetables. Tenemos que mantener estos puntos de vista en la alcantarilla. En la lucha contra el racismo también tenemos que luchar contra la austeridad y por los empleos y los hogares.
“El movimiento obrero da la bienvenida a todos en este país, excepto a los fascistas y racistas.”
Diputada laborista
En su mensaje de apoyo la diputada laborista Diane Abbott dijo: “La extrema derecha está en aumento cuando ya pensábamos que había sido condenada al basurero de la historia. Necesitamos un movimiento que desafíe a Donald Trump y Steve Bannon”.
Y en respuesta a que Bannon dijo que usa la descripción racista como una insignia de honor, ella dijo: “Todos deberían usar una insignia de Stand Up to Racism. Esa es la única insignia de honor en Gran Bretaña.”
El secretario general del enorme sindicato Unite, Len McCluskey, dijo: “A Stephen Yaxley-Lennon [Tommy Robinson] le digo esto. No representas a mi clase trabajadora, que siempre ha rechazado y luchado contra la suciedad racista que echas. Si vienes por nuestros hermanos y hermanas musulmanes, vienes por todos nosotros y nos resistiremos.”
Necesitamos más protestas y un movimiento antirracista más fuerte.
Matt Wrack, del sindicato FBU de los bomberos, dijo: “La unidad es el principio fundamental de nuestro movimiento. Cualquier cosa que se interponga en el camino de nuestra unidad debe ser expulsada de nuestras calles.”
Kevin Courtney, secretario general conjunto del sindicato de profesorado, NEU, dijo: “Se ve el racismo en Tommy Robinson y en la DFLA. Pero también hay que verlo en la política general.”
Weyman Bennett, co-coordinador de SUTR dijo: “Tenemos un trabajo que hacer. Detuvimos a Tommy Robinson la última vez y lo detendremos de nuevo. Tienen Bolsonaro, y Trump y AfD en Alemania. Pero tenemos los números y la determinación. Tendremos unidad y solidaridad para vencerlos.”
Mas acción
Esta marcha fue un gran paso adelante en la batalla contra el racismo conservador y la amenaza de extrema derecha de Tommy Robinson y sus partidarios.
Debe ir seguido de más acción, organización de SUTR a nivel local y en los lugares de trabajo, y resistencia a Robinson y sus secuaces cuando intentan organizarse o marchar.
No podemos depender del Partido Laborista, que tiene un cuestionable historial de lucha contra el racismo, tanto en el poder como a menudo cuando está en la oposición.
Debido a que el capitalismo y el racismo están entrelazados, la lucha contra el sistema debe tener el antirracismo en su centro. Y para arrancar las raíces del racismo necesitamos deshacernos del capitalismo.
Artículo original en Socialist Worker, periódico de nuestra organización hermana en Gran Bretaña.
Foto: Dave Gilchrist, SWP GB